El mundo de la moda es tan maravilloso como confuso. Es una de las industrias más lucrativas, pero al mismo tiempo de las más controvertidas entre su impacto en el medio ambiente, discriminación, funcionalidad y hasta el tema de la estética. Entre colecciones siempre hay algo de qué hablar. Y una vez más, Balenciaga acapara la conversación acompañada de controversia.

Hace unos años, en 2018 para ser exactos, la casa de moda española fundada por Cristóbal Balenciaga, estuvo en medio de una discusión cuando sacó un abrigo “inspirado” en un chiste de Joey en Friends. ACÁ les contamos más. Luego, agarró un par de Crocs y les puso plataforma con un costo de 800 dólares. Unos años después, agarraron otros crocs, y le pusieron tacones, dando paso a los no oficiales stiletto crocs. AQUÍ la nota.

Ahora, Balenciaga vuelve a causar revuelo por el lanzamiento de unos tenis que cuestan casi dos mil dólares… pero que parecen los recogieron de unos cables en la Ciudad de México.

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Los tenis Balenciaga que están rotos

Los tenis que Balenciaga sacó ahora, forman parte de la colección de Paris Sneaker, la cual se integra a un plan de la marca de hacer crecer la parte de calzado (sneakers, sobre todo) entre los llamados “dad shoes”, el efecto Y2K y los “ugly shoes”.

Esta nueva parte de la colección muestra dos tipos de calzado tanto en forma como en estilo. En forma están los que vienen en forma de bota y los que vienen como mule. Mientras que en el estilo, hay unos que están más rotos que otros… y para ser justos, unos que se ven más apestosos (de verdad) que los otros.

Entre las características de estos tenis, descritas en la página, está el graffiti con el logo de Balenciaga que contratasta con el color, las roturas a lo largo de toda la estructura, así como en las gomas y la tela. Cabe destacar que los tenis están hechos en China (o bien, podría salir de un festival cualquiera, jiar jiar).

¿De a cuánto por un par?

Uno podría pensar que el gusto se rompe en géneros. No somos nadie para juzgar a quien decide usar unos tenis rotos, y menos cuando en la juventud nos aferramos al par más horrible y apestoso, pero el más cómodo de nuestro clóset. La cosa que más nos impresiona, además de la idea de comprarse unos tenis que parecen estar en sus últimas, es el precio.

Unos Balenciaga al mero estilo vagabundo (es decir, lo más rotos) te salen en unos 1,850 dólares (echando el cálculo, serían unos 37 mil pesos mexicanos). Luego, los que están entre deslavados y un poco rotos, están en 625 dólares. Y los mule, que vienen un poco deshilachados, están en 495 dólares.

Ahora bien. Si lo suyo no es traer el pie ventilado, entonces hay unos Paris Sneaker de Balenciaga que están ligeramente rotos, pero más como un detalle en el diseño que apenas si es visible. Los tenis vienen en tres colores distintos que describiremos, en términos simples, como color crema, mamey y azul marino.

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