Connect with us

Actualidad

Solo hay una cosa que puede evitar el plan de la NASA para destruir la ISS. El problema se llama Rusia

Published

on


Para 2030, quizás 2031 como fecha tope, la NASA tiene un ambicioso e histórico plan. Entonces se llevaría a cabo la maniobra final de desorbitación, es decir, el final de la ISS para dirigir el complejo de más de 450 toneladas hacia un reingreso seguro sobre un tramo remoto del océano. No es un proyecto cualquiera, por supuesto, pero posiblemente en estos momentos, el principal escollo al que se enfrenta la agencia espacial no sea la construcción del vehículo que “guiará” a la estación. El principal problema es geopolítico, y tiene a Rusia como actor principal.

El compromiso ruso. Tras varios años de tiras y afloja, de declaraciones que subían la tensión entre Rusia y Estados Unidos sobre uno de los pocos ejemplos de cooperación entre ambos gobiernos, parecía que las amenazas en torno a la ISS habían terminado. Así quedó rubricado cuando Rusia extendió formalmente su compromiso con la ISS hasta al menos 2028. ¿El problema? Que la NASA y las agencias espaciales de Europa, Japón y Canadá acordaron mantener la estación espacial hasta 2030. 

De fondo: el plan de “destrucción” de la ISS no es para 2028, es para 2030, y se necesita sí o sí a Rusia en la ecuación para llevarlo a buen puerto. De hecho, así lo expresó hace unos días Robyn Gatens, directora del programa ISS en la sede de la NASA, “tenemos esa incertidumbre, de 2028 a 2030, con Roscosmos. Esperamos tener noticias de ellos durante el próximo año o dos en lo que respecta a sus planes de seguimiento, con la esperanza de que también se extiendan hasta 2030”.

El plan. Lo contamos hace unos meses. La NASA eligió a SpaceX para desarrollar y entregar un vehículo espacial que desorbite de forma controlada la Estación Espacial Internacional (ISS) al final de su vida útil, en el año 2030 (2031 como tope). En la práctica, esto significa que la nave de SpaceX se usará para “remolcar” la estación espacial hasta un lugar alejado de cualquier población donde reentrará de manera segura.

La NASA espera que la mayor parte de la ISS, así como el vehículo de desorbitación, se desintegren en la atmósfera durante su reentrada, previsiblemente sobre el océano Pacífico. Si se mantienen las fechas, la tripulación final de la ISS probablemente se lanzaría a fines de 2029 y permanecería a bordo del complejo durante un año, luego regresaría a casa antes de que se encienda la última desorbitación para guiar al enorme laboratorio de regreso a la atmósfera.

Por qué es importante la extensión. Lo primero que hay que explicar es Roscosmos trabaja en incrementos de cuatro años, de ahí la decisión de Rusia del año pasado al extender la participación en el programa de la estación espacial de 2024 a 2028. La NASA necesita tener esa vinculación hasta 2030 porque el plan con la ISS no podría darse. Los segmentos estadounidense y ruso de la ISS dependen uno del otro para funciones críticas.

Pensemos que la sección estadounidense genera la mayor parte de la electricidad de la estación espacial y mantiene la orientación del laboratorio sin utilizar el preciado combustible para cohetes. Por su parte, Rusia es responsable de mantener la altitud de la estación y de maniobrar el complejo para que no se interponga en el camino de la basura espacial.

A Rusia no le conviene… Para Rusia no es una buena noticia desvincularse antes de tiempo de la ISS, por supuesto. Para empezar, no es factible que tenga su propia estación espacial en órbita baja terrestre en cuatro años, por lo que abandonar su papel en la estación dejaría a la nave espacial rusa Soyuz sin destino. Además, Roscosmos se quedaría sin gran parte de su programa de vuelos espaciales tripulados.

Sin embargo… Ocurre que dos y dos no son cuatro en clave geopolítica, y, por ejemplo, la guerra de Ucrania podría cambiarlo todo. Sin ir más lejos, Putin amenazó hace unos días a occidente sobre el posible uso de armas estadounidenses y europeas por parte de los ucranianos en suelo ruso, “esto significará que los países de la OTAN, Estados Unidos y los países europeos están luchando contra Rusia”, dijo entonces.

No es un tema baladí. La propia Gatens ahondaba la semana pasada en esa gran duda que se cierne sobre la decisión rusa, “si deciden no extenderse, tendremos que analizar qué significa eso. Si el vehículo de desorbitación está listo, ¿seguimos adelante y lo traemos a casa? ¿Tenemos una manera de continuar? Obviamente, presenta un riesgo, y tendremos que pensar en cuáles son las implicaciones que eso tiene para nosotros”.

¿Es posible seguir sin Rusia? A esta hora nadie tiene claro qué ocurriría en el caso de que Rusia se negara a vincularse dos años más. Ken Bowersox, administrador asociado de la NASA para operaciones espaciales, comunicó hace poco que la agencia ya ha tenido varias reuniones de alto perfil evaluando un plan B: “Mucho depende de lo que suceda después de que el equipo ruso decida que no van a ir más allá de 2028”.

El hombre fue mucho más allá, indicando que, posiblemente, sin el “lado ruso” la ISS simplemente no funcionaría, “¿sería un corte abrupto, (donde) apagan todas las luces y ya no proporcionan ni siquiera propulsión? ¿O podrían seguir proporcionando propulsión, pero necesitamos proporcionar alguna otra contribución para compensar eso, o se van volando (sus módulos)? Eso es lo menos probable. Ya sea un corte abrupto o si continúan proporcionando un nivel mínimo de apoyo, eso afecta bastante a lo que hacemos”.

Dudas y más dudas que solo Rusia será capaz de dilucidar con un sí o un no, aunque la respuesta no parece que vaya a darse a corto plazo. Quizás la guerra de Ucrania aclare la decisión.

Imagen | ESA

En Xataka | Nuevo récord en el espacio: nunca habíamos tenido tantos humanos en órbita terrestre al mismo tiempo

En Xataka | Un millonario acaba de llegar adonde solo había llegado la NASA. Es un aviso de lo que le espera al espacio en el futuro

ues de anuncios individuales.

Source link

Continue Reading

Actualidad

la construcción del rascacielos más alto del mundo

Published

on


China es sinónimo de megaconstrucciones. Además, en tiempo récord, pero hay dos países que llevan años en una particular batalla en la que el hormigón es el absoluto protagonista. En 2010 se inauguró el imponente Burj Khalifa, destronando al Taipei 101 como el edificio más alto del mundo y dando el pistoletazo de salida a una guerra entre Emiratos Árabes y Arabia por ver quién hacía el rascacielos más vasto.

Y, aunque hemos visto numerosos rascacielos estos últimos años, hay dos que tienen entre ceja y ceja superar al Burj Khalifa: la Creek Tower y la Torre Jeddah. Y quizá es esa ambición la que se está llevando los dos proyectos por delante.

La Torre Jeddah saudí. Es uno de los proyectos más ambiciosos del mundo y se espera que, cuando esté completa, se convierta en el edificio más alto del mundo. Arabia Saudí tiene claro que debe destronar al Burj Khalifa de 828 metros con esta torre que superará los 1.000 metros de altura. ¿Cuántos, exactamente? No lo sabemos, ya que aunque las obras comenzaron en 2013, van bastante despacio.

Será una torre que albergará un hotel de lujo, apartamentos residenciales, oficinas y el observatorio más alto del mundo y contará con la friolera de 59 ascensores, cuatro de ellos de doble piso. ¿Su diseñador? El estadounidense Adrian Smith, el mismo que diseñó el Burj Khalifa con el que tendrá cierto parecido.

Torre Jeddah
Torre Jeddah

La Creek Tower de Dubai. Esta es mucho más reciente, ya que las obras comenzaron en 2016 y los datos son bastante más difusos. Como el Burj Khalifa, la Creek Tower estará en Dubai y será una construcción muy diferente a las otras dos torres. Será más una torre recreativa con restaurantes, lugares para pasar el tiempo y diez plataformas de observación (con suelo de cristal para ver toda la ciudad.

También podrá albergar algunas residencias de lujo, pero un número muy escaso como para ser considerado el “edificio más alto del mundo”, al menos técnicamente. ¿Y de qué altura estamos hablando? De entre 828 metros y 1.400 metros. Es un abanico enorme, pero lo que tenían claro es que debía superar los 828 de la megaconstrucción icónica de la ciudad.

El diseño, además, es peculiar, y el arquitecto líder del proyecto es el “reconocido” Santiago Calatrava.

Dificultades compartidas. Las dos construcciones comparten más elementos de los que podría parecer. Ambas tienen un diseño peculiar, ambas son altísimas y ambas… arrastran problemas desde hace años. Por diferentes motivos, eso sí.

La construcción de la Torre Jeddah se detuvo en 2018 debido a la lucha de la casa real contra la corrupción administrativa, política y real. En un proceso conocido como ‘la purga’, el príncipe heredero creó un comité que detuvo a 281 personas. Fue un proceso tremendamente polémico debido a que en paralelo, parece que un grupo de la muerte operaba para asesinar a los disidentes de manera silenciosa. Las obras se reanudaron oficialmente en febrero de este año.

En el caso de la Creek Tower, su inauguración estaba prevista para algún momento de 2020, pero el COVID-19 obligó a paralizar la obra y la construcción no ha levantado cabeza aún. En 2024 se realizaron algunas actualizaciones del proyecto, confirmando que la altura definitiva quedaría lejos de lo que se esperaba y, con un total de 745 metros, no cumplirá el objetivo de superar al Burj Khalifa.

El plan más loco. Ahora bien, aunque estas dos torres son colosales, hay un proyecto de Arabia Saudí que quiere dejarlas a la altura de un bloque residencial normal y corriente. No tiene nombre, pero sí una altura objetivo: 2.000 metros. Sólo sabemos que es algo que está en el horizonte y que será responsabilidad de los arquitectos de Foster +. Partners. Y sí, es una idea del mismo país que está construyendo El Mukaab, el aeropuerto de Riad y The Line, por lo que es seguro que lo intentarán.

Samsung, la ganadora silenciosa. Y aunque no está muy claro qué es lo que pretenden los dos países con esta particular batalla de megaconstrucciones, lo evidente es que hay compañías que se están llenando los bolsillos con estos proyectos. Y más allá de constructoras locales y arquitectos extranjeros, hay que mencionar a Samsung. Concretamente, a la división Samsung C&T Engineering and Construction Group que se encargó de la construcción del Burj Khalifa y que está al mando de la Creek Tower.

Y no son las únicas construcciones de la división surcoreana, ya que, dentro de Vision 2030, la compañía anunció en diciembre del año pasado que habían terminado la construcción del primer sistema de metro de Arabia Saudí bajo Riad, un sistema totalmente automatizado sin conductores y que estuvo en construcción 11 años con un costo total de más de 2.400 millones de dólares.

Imágenes | Jeddah Tower, Emaar

En Xataka | El edificio más alto jamás diseñado es un colosal (y teórico) rascacielos de cuatro kilómetros: el X-Seed 4000

ues de anuncios individuales.

Source link

Continue Reading

Actualidad

un tanque casero que destrozó medio pueblo

Published

on


Lidiar con la Administración pública puede ser tedioso. Papeleo, tiempos dilatados y trámites que podrían hacerse en un par de clics por Internet, pero que tenemos que realizar de forma presencial. Como mucho, nos podemos frustrar, enfadar y soltar algún improperio como que cogerías un bulldozer y te pondrías a derribar edificios públicos, sabiendo que nunca harías algo así.

El problema es que, precisamente, eso es lo que un hombre llamado Marvin Heemeyer hizo en 2004 en la localidad de Granby, en Colorado.

Marvin Heemeyer. En el momento de los hechos, Marvin tenía 52 años. Era veterano de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos y su profesión era la de soldador en el mencionado Granby, pero la historia comenzó mucho antes. En 1992, Heemeyer compró unos terrenos con la intención de alquilarlos a un amigo que quería montar un taller de reparación. Esos terrenos eran propiedad de una familia, los Docheff, y parece que no quedaron muy contentos por la victoria de Marvin en la subasta.

Marvin Heemeyer
Marvin Heemeyer

¿El precio de los terrenos? 42.000 dólares de la época y era muy básico, ya que no tenía una solución para las aguas fecales y el acceso dependía de unos terrenos contiguos. El ayuntamiento le avisó de que debía poner solución a eso, conectándose al alcantarillado (otros 42.000 dólares) o poniendo una fosa séptica. Se negó y, entre tanto, el amigo que le iba a alquilar el terreno se desencantó con el negocio, por lo que el propio Heemeyer abrió ahí un taller de reparación de silenciadores.

Culebrón. Los Docheff no olvidaron la subasta de 1992 en la que Marvin les quitó el terreno y, en 1997, atacaron. ¿Cómo? Comprando las tierras alrededor de las de Marvin para crear una planta cementera. En principio, querían comprar también la de Marvin, pero éste pidió primero 250.000 dólares, luego otros 125.000 dólares y, cuando los Docheff consiguieron el terreno, Heemeyer volvió a subir el precio a 450.000 dólares.

No hubo acuerdo, pero los Docheff continuaron con su plan. Heemeyer emprendió una acción para poner al pueblo en contra de la planta de cemento alegando que sería un atentado ecológico, pero poco a poco fue perdiendo apoyos, sobre todo cuando el periódico de la ciudad argumentó que tenía una venganza personal contra los Docheff.

Al ataque. En el 2000, el soldador presentó una demanda para bloquear el proyecto. Alegaba que la construcción bloquearía el acceso a su negocio, pero los funcionarios locales aprobaron unánimemente la construcción y, aunque apeló, nadie le hizo caso. Escaló el caso a la Agencia de Protección Ambiental, que también pasó del asunto.

En 2001, casi en un acto de soberbia, los Docheff hicieron una oferta a Heemeyer: si retiraba la demanda, le proporcionarían una línea de conexión al alcantarillado de la nueva planta de hormigón sin pagar un dólar. Marvin no se lo tomó bien, precisamente. El camión cisterna que usaba para acumular las aguas fecales se llenó y su decisión fue la de bombear los residuos a una parcela anexa a la suya.

Ilegalidades. También se intentó conectar de forma ilegal al alcantarillado de un vecino, pero lo pillaron y, debido a que no estaba conectado al servicio y a otras irregularidades, fue multado con 2.500 dólares, unos 4.400 dólares de la actualidad. La ciudad se había cansado de Marvin y le lanzaron un ultimátum: o se ponía al día con todo o no podría utilizar la propiedad con fines comerciales.

Komatsu575a
Komatsu575a

El bulldozer en cuestión

‘Killdozer’. Marvin sintió que la ciudad se había reído de él, que las administraciones lo ignoraban y que había sido marginado. Y no se lo tomó nada, pero que nada bien. En octubre de 2002, anunció el cierre del negocio. Vendía todo: materiales, terreno y una excavadora Komatsu D344A que había comprado ese mismo año. Y sí, colocó parte de su propiedad por 400.000 dólares (muchísimo más que por lo que la compró diez años antes), pero hubo algo que no logró sacarse de encima: la excavadora.

“Señal de Dios”. Lo vio como “una señal de Dios” para llevar a cabo su venganza contra la ciudad. Durante meses, Marvin trabajó blindando la excavadora. No se escondió y, de hecho, mencionó a amigos tanto la máquina como sus planes de usarla de forma destructiva, pero nadie le hizo caso. La excavadora, conocida como ‘Killdozer’ y bautizada como ‘Marv’s Komatsu Tank’ por el propio Heemeyer, estaba irreconocible.

Había blindado toda la zona de la cabina con una capa de acero de varios milímetros de grosor, una capa de hormigón y otra capa exterior de acero. Cubría parte del sistema oruga, pero también el motor y la cabina al completo. O se quedaba sin gasolina, o era imparable. Además, había colocado cámaras protegidas por casi ocho centímetros de plástico en el exterior que mandaban señal de vídeo a dos monitores en el salpicadero, tenía ventiladores para mantenerse fresco y lo más preocupante: tres boquillas con armas montadas, listas para disparar al exterior.

Killdozer
Killdozer

Y el ‘Killdozer’

133 minutos de terror. Con este tanque improvisado, la sobremesa del 4 de junio de 2004, Heemeyer empezó su venganza. Y lo hizo contra la planta cementera de Cody Docheff. El empresario pensaba que el vehículo era controlado de forma remota, por lo que empezó a disparar sin causar efecto alguno. Los policías de la ciudad también dispararon varias rondas contra la excavadora sin poder dañar ni las cámaras. Era imparable y los vídeos son espeluznantes.

Killdozer. La ‘Killdozer’ se lleva por delante todo aquello con lo que choca y, tras atacar la planta de hormigón, Heemeyer se dirigió hacia la ciudad. Allí destruyó coches, la fachada del ayuntamiento, la comisaría de policía y varios coches patrulla, así como unos cuantos negocios. Los objetivos no eran casuales: el mencionado ayuntamiento, una oficina de una persona que formaba parte de la junta de recalificación de terrenos, la comisaría, el periódico local y otras propiedades de gente que habría estado en contra de Marvin en su peculiar disputa con los Docheff.

“Dios me construyó para este trabajo”. Durante más de dos horas, los policías siguieron el vehículo totalmente impotentes. En unas cintas que mandó a su hermano poco antes del ataque, Marvin declaró que estaba sorprendido de que nadie lo hubiese pillado modificando al excavadora y que todo eso era parte de hacer cumplir la voluntad de Dios

Afirmó que Díos lo había construido para dar una lección a la ciudad de Granby y que por eso estaba soltero y sin hijos: su misión en la vida era llevar a cabo el ataque. En las tres horas de grabación, Marvin atacó a todo el mundo en la comunidad, afirmando que “para salir adelante, tienes que pisotear al vecino y hablar mal del prójimo en todo momento. También dijo que su muerte era inevitable. No se equivocaba.

La venganza de los siete millones de dólares. Tras desfigurar una decena de edificios, la excavadora se atascó en la parte trasera de una ferretería. No tenía salida, pero sí sabía que no iba a salir vivo de aquello. No había matado a nadie (de casualidad, ya que disparó repetidamente contra objetos inflamables que, de haber explotado, habría tenido nefastas consecuencias), pero tenía claro que él ya había cumplido y se quitó la vida de un disparo dentro de su tanque.

7 millones. La conmoción en la ciudad fue terrible y los daños se estimaron en siete millones de dólares. Pero, como esto de ensalzar a personas que realizan hechos cuestionables no es nada nuevo, Heemeyer tuvo defensores. Afirmaron que voluntariamente decidió no matar a nadie, sólo acabar con bienes materiales, y hay quien lo cataloga de mártir y de ejemplo de un acto de desobediencia civil patriótica contra las autoridades corruptas.

Para impedir que la excavadora se convirtiera en un punto de peregrinación, en abril de 2005 la ciudad la desguazó y repartió sus piezas por diferentes desguaces. Y, si estás pensando que es una historia de película, la hay. Se llama ‘Tread’, pero lamentablemente en España no está disponible en ningún lado. Y es una pena porque tiene muy buenas valoraciones.

Imágenes | Michael Thomson

En Xataka | Esta estremecedora crónica de un asesino en serie que acaba de  llegar a Prime Video cambió el cine de su país para siempre

ues de anuncios individuales.

Source link

Continue Reading

Actualidad

el fenómeno del año en TikTok España es una influencer ataviada al modo de doncella decimonónica

Published

on


El fenómeno de Inés de Robles (más conocida como inesdrobles) es particular por razones muy distintas. Por una parte, es una tiktoker de moda que, sin embargo, permanece fiel a un estilo que ni siquiera puede calificarse de vintage, sino que abraza lo rancio y poco estridente como seña de identidad. Segundo, quienes le han encumbrado son sus comentaristas. Y ahora, está cabalgando la ola de la fama tiktoker.

La plantilla. Los vídeos de Inés de Robles son siempre iguales, lo que sin duda le ha ayudado a establecer un estilo definido. Por ejemplo, nunca habla; simplemente, con una música inusualmente actual de fondo (Quevedo, Mar Lucas, J Balvin, Ozuna… toda una playlist propia de una joven de gustos mainstream), que acompaña con playbacks a menudo espantosos. Ataviada con vestimentas vintage, que a veces rozan lo directamente propio del siglo pasado (aunque, como veremos, no del todo), hace siempre un gesto característico: dobla un pie sobre la rodilla de la pierna contraria, y lo estira y apoya en el suelo como si fuera un paso de ballet.

11 TRUCOS para DOMINAR TIK TOK

Los comentarios. Sin embargo, lo que la ha convertido en viral son sus comentaristas: con un sentido del humor muy blanco y nada ofensivo, bromean acerca de la estética anticuada de los vídeos. “Ella no hace exámenes de historia, hace storytimes“, “He bajado tanto que he llegado al Renacimiento”, “Me salió en ‘Para su ilustrísima’ y le di ‘Me agrada'”, “¿Fonógrafo de la dama?”, “Este vídeo me ha hecho recordar al verano de 1874”, “Eso es el Tratado de Tordesillas recién firmado, ¿verdad?”… Poca broma: sus vídeos no bajan de un millón de reproducciones y suelen superar los cuatro, y cada uno ronda los 300.000 ‘Me gusta’ y varios miles de comentarios.

Llegan los famosos (y las promociones). La fama está llamando a la puerta de Inés de Robles en forma de faranduleo, con colaboraciones donde otra gente posa junto a ella y hace su famoso gesto con el pie. Algunos de ellos han sido Beéle, Violeta Mangriñán, Omar Montes y hasta Iker Casillas. Y por supuesto, han llegado las promociones, unas más desnortadas (¡Grefusa!, una óptica futurista), y otras más apropiadas (Carolina Herrera, una copistería online donde dice haber impreso la Biblia de Gutenberg). Sus últimos nueve vídeos, todos los de abril, son invitados o promociones pagadas.

Un atractivo inimitable. El resultado de toda esta mezcla es una cuenta fascinante, ya que Inés de Robles nunca habla, lo que la hace parecer una joven del pasado atrapada en una burbuja. El curioso uso de artistas tan inadecuados como La Zowi o Bad Gyal de fondo en sus vídeos contrasta con las descripciones de los vídeos, a medio camino entre la ingenuidad (“Disfrutando del atardecer”, “Día de excursión”) y lo conscientemente rancio (“Apercibida para el té de jueves”, “Martes de mandados”). O es una performance cuidadísima o uno de los últimos rastros de espontaneidad de TikTok. Y si es así… ¿qué nos quiere contar exactamente?

Watch on TikTok

Inés: Origins. Para descubrir la respuesta solo hay que retroceder al principio de su cuenta, no muy atrás en el tiempo (julio del año pasado), donde ya vemos elementos como la música de moda y la exhibición de trapitos, pero en una línea indiscutiblemente más moderna, acompañada de sus dos hermanas. Alguna foto vinculada a la gimnasia rítmica también deja claro de dónde viene el famoso y enigmático gesto con la pierna. Los outfits son, sobre todo los últimos, ya directamente salidos de una telenovela de época de La 1, pose para proseguir con el chiste de la viajera en el tiempo.

El estilo Old money. Como absolutamente todo puede ser categorizado, la estética de Inés de Robles se puede enmarcar en una corriente reciente conocida como Old Money, un estilo con puntos de conexión con las modas cayetana, preppy, católica o pija y que se inspira en el estilo de vida de las familias ricas estadounidenses, con exhibición de ocio lujoso: golf, hípica o tenis. Abundan en este estilo las faldas de tablas, los polos, las perlas… todo lo que implique una categoría social en la que no se acaba de entrar, sino que lleva generaciones en la familia (de ahí lo de “dinero viejo”, traducción literal no muy acertada). Por supuesto, aquí los ingeniosos comentarios de la cuenta han retorcido el concepto y han llevado a Inés a vestirse con ropa que va más allá de lo meramente aristocrático para meterse en lo directamente decimonónico.

Cabecera | TikTok

En Xataka | Llevamos años esperando horas en los aeropuertos. La “teoría del aeropuerto” de TikTok cree que ha sido un error



ues de anuncios individuales.

Source link

Continue Reading

Trending