La ONG FairSquare presentó esta semana una denuncia ante la Comisión de Ética de la FIFA contra el presidente Gianni Infantino, acusándolo de violar las normas de neutralidad política establecidas en el Código 15 de Ética de la FIFA.

“El Artículo 15 de la FCE exige a los directivos del fútbol mantener una neutralidad política en sus relaciones con los gobiernos y prevé la prohibición de realizar actividades relacionadas con el fútbol por hasta dos años, pena que puede incrementarse en caso de reincidencia”, señala FairSquare.

Así, la queja presentada señala cuatro casos específicos donde Infantino expresó públicamente su apoyo a políticas del presidente estadounidense Donald Trump, además de cuestionar el proceso detrás de la creación y entrega del nuevo Premio FIFA de la Paz otorgado al mismo Trump el pasado 5 de diciembre durante el Sorteo del Mundial 2026.

FairSquare cuestiona que posteriormente a la entrega se proyectó un video institucional que elogia la política exterior del mandatario y destaca a lo dicho por el presidente de la FIFA sobre el escenario.

Esto es lo que esperamos de un líder… usted definitivamente merece el primer Premio FIFA de la Paz y siempre puede contar con mi apoyo, señor Presidente.

El documento también retoma el 5 de noviembre de 2025 , cuando Infantino fue entrevistado en el American Business Forum de Miami y al ser cuestionado sobre su relación con el presidente Trump, Infantino declaró:

“Al final, fue elegido con base en su programa, con base en lo que dijo. Simplemente está implementando lo que prometió, así que creo que todos deberíamos apoyar lo que está haciendo, porque creo que pinta bastante bien.”

Sobre el Premio Nobel de la Paz, el 9 de octubre de 2025 Infantino publicó en su cuenta de Instagram: “ El presidente Donald J. Trump definitivamente merece el Premio Nobel de la Paz por sus acciones decisivas” en relación con el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás.

Finalmente, cita un video publicado por Infantino el 20 de enero de 2025 , en el cual agradece a Trump por invitarlo a su investidura presidencial. Infantino concluyó  con una declaración que a parecer de FairSquare podría interpretarse como un apoyo al movimiento político del presidente Trump en Estados Unidos: “ Juntos haremos que no sólo Estados Unidos vuelva a ser grande, sino también el mundo entero”.

El documento destaca que aunque el papel de Estados Unidos como coanfitrión del Mundial 2026 exige que la FIFA interactúe con el presidente estadounidense, la interacción de  Infantino con el presidente Trump debe basarse en neutralidad.

La denuncia argumenta que “al ofrecer un claro apoyo a la agenda política del presidente Trump, tanto en el país como en el extranjero, el Sr. Infantino ha incumplido reiteradamente su deber de neutralidad política, lo que supone una clara amenaza para la integridad y la reputación del fútbol y de la propia FIFA“.

Además, la denuncia solicita una investigación sobre el papel de Infantino en la creación del Premio FIFA de la Paz, señalando que el Consejo de la FIFA, órgano encargado de definir políticas estratégicas, aparentemente no fue consultado ni informado sobre esta iniciativa que habría sido implementada de manera acelerada y con falta de transparencia.

FairSquare subraya que esta sería la cuarta vez que se solicita investigar a Infantino ante el Comité de Ética, ya que las tres denuncias anteriormente presentadas no derivaron en sanciones.

Nicholas McGeehan, director del programa de FairSquare, declaró que esta queja representa un llamado a cambiar la estructura de gobernanza de la FIFA, que según él ha permitido que Infantino actúe de manera contraria a los intereses y la integridad del futbol.

“Esta queja va mucho más allá del apoyo de Infantino a la agenda política del presidente Donald Trump. En términos más generales, se trata de cómo la absurda estructura de gobernanza de la FIFA ha permitido a Gianni Infantino burlar abiertamente las normas de la organización y actuar de forma peligrosa y directamente contraria a los intereses del deporte más popular del mundo.”

El defensa español Sergio Ramos se despidió del Club de Fútbol Monterrey con una publicación en las redes sociales, en la que agradece la experiencia y el trato recibido en México y el orgullo que ha sentido en esta etapa “por portar el brazalete de capitán de Rayados”.

“Decir adiós nunca es fácil. Termina una etapa que arrancó llena de ilusión en febrero y que me ha permitido descubrir, un país, una ciudad, un fútbol… y que me deja muchas experiencias nuevas y, sobre todo, muchos amigos”, dijo Ramos en su cuenta personal de X un día después de hacer pública su marcha del fútbol mexicano y el final de su trayectoria en Monterrey, donde ha estado algo menos de un año.

“Por siempre me sentiré orgulloso de haber llevado el brazalete de capitán de Rayados, de haber liderado al equipo en el primer Mundial de Clubes en su nuevo formato, de haber batallado en el Clausura, en el Apertura, en la Leagues Cup, en la Concacaf Champions Cup… y de haber defendido con coraje el Gigante de Acero a vuestro lado en todos los partidos que hemos jugado en casa”, dijo en su mensaje el campeón del mundo con España en 2010.

Ramos destacó su entrega sobre el terreno de juego. “Lo he dejado todo en la cancha y fuera de ella para poder dar mi mejor rendimiento. 34 partidos, más de 3,000 minutos, 8 goles y tantas emociones que no se pueden describir en cifras”, dijo.

“Al club, a mis queridos compañeros, a los cuerpos técnicos, a los empleados, a todos, gracias. Y, sobre todo, gracias a vosotros, aficionados, que me habéis hecho llegar vuestro calor y vuestro cariño desde el primer momento que pisé la ciudad. Siempre recordaré con nostalgia esta etapa de mi carrera y siempre diré con orgullo “¡Arriba el Monterrey!”, concluye el jugador español de 39 años que estuvo dieciséis años en el Real Madrid, cuatro en dos etapas en el Sevilla y dos en el París Saint Germain.