El horario de servicio del domingo 5 de enero en el Metro será de 7:00 a las 24:00 horas
Los Reyes Magos ya están alistando los últimos detalles para repartir regalos a los niños en México y el mundo. La buena noticia es que, podrán viajar en el Metro de la CDMX con todos los regalos grandes o pequeños, subir con bicicletas y más, siempre y cuando tengan mucha precaución.
Durante la madrugada del 6 de enero en que los niños reciben algunos regalos de los Reyes Magos.
El anuncio del Metro para los Reyes Magos
Como cada año Melchor, Gaspar y Baltazar visitarán la Ciudad de México y para realizar ese recorrido tan extenso podrán usar el Metro, además de su caballo, elefante y camello.
En sus redes sociales, el Metro invitó a los Reyes Magos a usar sus diferentes líneas para transportar la gran cantidad de regalos durante los días previos al 6 de enero del 2025.
“Previo a la llegada mágica de los Reyes Magos, el Metro se ofrece como una alternativa para el traslado de regalos a través de las 12 Líneas de la red y solicita de forma atenta tener en cuenta las siguientes recomendaciones para evitar contratiempos en el servicio” escribió el Metro.
Eso sí, deberán ser muy cuidadosos al subir y bajar de cada vagón con los regalos que hagan grandes bultos. También permanecer en todo momento detrás de la línea amarilla y sujetar muy bien sus pertenencias para evitar que objetos caigan en las vías.
Es muy importante recordar a los Reyes Magos que el horario de servicio del domingo 5 de enero en el Metro será de 7:00 a las 24:00 horas. Para que no se les haga tarde y planeen con tiempo cada uno de sus viajes.
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Además de los cinco muertos, se reportan siete heridos
El nuevo ataque que ensombrece Tabasco ocurrió anoche, 4 de enero, en el bar “Azul”, ubicado en la colonia Tamulté de las Barracas, en Villahermosa. Según los reportes, un grupo armado arribó al lugar para, sin más, disparar en contra de los clientes del lugar.
Resultado del ataque, murieron cinco personas y siete más resultaron heridas. Como es “tradición”, arribaron elementos de Seguridad y se montó un operativo… pero ya nomás para hacerle al cuento: nada se sabe sobre los responsables del ataque.
De acuerdo con Animal Político, horas antes de lo ocurrido en el bar de Villahermosa, ya se habían registrado (oficialmente) cinco asesinatos en la entidad. Estos se ejecutaron en los municipios de Paraíso, Cárdenas, Macuspana, Centro y Jalpa de Méndez.
Tabasco lleva semanas registrando alza en la violencia
Les decimos… así, “bajita la mano”, se ve que “algo” está ocurriendo en Tabasco. ¿O a qué se deberá que, en los últimos tres meses la violencia se ha recrudecido?
Y no se trata de violencia “común” la que se ha vivido en las últimas fechas allá: se han reportado balaceras, incendio de tiendas y vehículos… en fin, violencia que hace pensar en la presencia aumentada de grupos criminales.
Si buscas un lugar para pasar una tarde tranquila, date una vuelta por los cafecitos bohemios de Coyoacán, uno de los barrios más tradicionales de la CDMX.
Cuando se trata de calles bonitas, cafés para pasar la tarde y tertulias interminables, sin duda Coyoacán se lleva el primer premio. Entre el centro de los coyotes y Francisco Sosa hay una colección de negocios locales, algunos viejos, algunos nuevos, que nos permiten no sólo sumergirnos en uno de los barrios más icónicos de la capital, sino entender cómo han evolucionado esos espacios con parques, plazas y cafés bohemios de Coyoacán que en otra época fueron un nido de artistas e intelectuales.
Y es que Coyoacán es más que callejones con leyendas y arquitectura inmortal. Es un barrio vivo en constante cambio que nos permite alejarnos del bullicio del centro y encontrar la tranquilidad para, por ejemplo, terminar un libro sin que nadie nos moleste. Lugares bonitos donde hay buen pan, toda clase de infusiones calientes y café tostado que a veces viene de las montañas de Veracruz y a veces de otros países.
Los restaurantes bohemios de Coyoacán son también una máquina del tiempo que nos lleva al corazón del siglo XX, a esos años en que podíamos encontrarnos a Frida debatiendo de arte en la Colonia del Carmen, a Salvador Novo haciendo crónicas de Viveros o a Dolores del Río caminando con el Indio Fernández.
¿Por qué los intelectuales aman Coyoacán?
Los cafés bohemios de Coyoacán se remontan a la Revolución Mexicana, ya que durante el conflicto armado, el barrio sirvió como el refugio perfecto de una buena parte de artistas e intelectuales que buscaban alejarse de sus ciudades o colonias y necesitaban una casa tranquila.
Fue así como en 1920 se inauguraron dos espacios fundamentales en la colonia; el Café Parroquia y el Café Príncipe, ambos negocios juntaban a artistas y académicos, que entre sus mesas discutían todo tipo de temas, entre ellos la llegada del surrealismo a la Ciudad de México y los movimientos de vanguardia que recorrían el mundo. Era común ver en sus mesas a José Clemente Orozco y a Diego Rivera.
En los años cuarenta, llegaron al barrio decenas de refugiados españoles que huían de la Guerra Civil, asimismo se establecieron algunas comunidades libanesas y de Sudamérica. Este gran flujo de migrantes hizo que Coyoacán se transformara y que se abrieran espacios como el Café del Sol, donde los extranjeros se encontraban para discutir de política e historia.
Finalmente, en los sesenta Coyoacán convocó a los jóvenes que entre el Café la Paz y el Café del Ángel, discutían sobre la contracultura y la posibilidad de cambiar el rumbo del país a través de ideas, libros y conciencia de clase. Ahí entre ceniceros llenos y tazas calientes nacieron los fundamentos de la Nueva Ola.
5 cafés bohemios de Coyoacán
Con esto en mente, hemos seleccionado algunos lugares que son ideales para charlar, comer y sentir esa atmósfera alternativa y liviana, que siempre ha vivido entre las calles empedradas de Coyoacán.
¿Qué tal un jardín al lado de la Fonoteca? Imaginen un espacio donde podemos pasar la tarde entre árboles gigantes, fuentes de piedra y mucha paz. Un lugar en el que la comida oaxaqueña se mezcla con una cartelera cultural que le da prioridad a las voces emergentes.
Entre Miguel Ángel de Quevedo y Francisco Sosa está la Ruta de la Seda, un lugarcito icónico que es muchas cosas a la vez. Es un café con panadería o una panadería dedicada a la repostería orgánica. Aquí se puede pedir desde un pastel con macha, hasta una infusión con jengibre.
Además de tener el mejor nombre, este establecimiento ofrece un poco de la experiencia del campo inglés con todo y su colección de tés negros en medio del sur de la Ciudad de México. Este restaurante ofrece pan recién hecho, café con olor a gloria y muchos platillos frescos, preparados con ingredientes orgánicos.
Dirección: Presidente Carranza 267, Santa Catarina
Ingredientes frescos, panes, quesos y conservas con esencia mexicana. En Los Amantes encontramos esa mezcla nostálgica que une las recetas de antaño con las calles preciosas de Coyoacán. Este es el sitio para comer un pan, tomar chocolate y recordar los mimos de la abuela.
En un pequeño local de la calle Higuera, hay una barra de café que se ha vuelto tradicional en el barrio. La dinámica es muy sencilla, llegas, pides tu bebida y si no hay gente, te la tomas en una pequeña banca sobre la arteria, no hay una experiencia más coyoacanense que esta.
Dirección: Higuera 40-A, La Concepción, Coyoacán
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La colonia Jardín Balbuena está entre las más icónicas de la capital mexicana. Se construyó en lo que eran grandes llanos y donde estuvo el primer aeropuerto de la CDMX.
Cada barrio de la CDMX tiene una historia muy significativa que lo hace único y especial. Tal es el caso de la colonia Jardín Balbuena, un lugar que en un principio estaba ocupado por grandes llanos y donde más tarde se estableció el primer aeropuerto de la capital mexicana para después convertirse en una colonia moderna y habitable, diseñada por los arquitectos Mario Pani y Agustín Landa Verdugo.
Hoy en día es una colonia que invita a recorrerse a pie gracias a sus palmeras y sus camellones arbolados. Este barrio de la alcaldía Venustiano Carranza y del oriente de la Ciudad de México también llama la atención por sus edificios de estilo modernista que tuvieron su origen durante la década de 1950.
En este lugar tenemos la Ciudad Deportiva Magdalena Mixhuca, que es el centro deportivo más grande de la capital y donde encontramos el Autódromo Hermanos Rodríguez y el Estadio GNP Seguros, que antes conocíamos como Foro Sol, entre otras importantes instalaciones dedicadas al deporte como la Alberca Olímpica y el Velódromo Olímpico Agustín melgar. Demos un salto al pasado y repasemos su historia.
Un campo aéreo en los Llanos de Balbuena
Mucho antes de que este barrio se convirtiera en la colonia Jardín Balbuena que hoy conocemos, el lugar era conocido como el Potrero de Balbuena, un lugar lleno de pastizales donde los indígenas paseaban y alimentaban a su ganado. Más tarde los terrenos fueron adquiridos por la familia Braniff y ahí establecieron la hacienda de La Magdalena, entonces el lugar empezó a ser conocido como los Llanos de Balbuena.
Para 1910 Alberto Braniff, famoso empresario y gran aficionado a la aviación, realizó el primer vuelo registrado de la Ciudad de México despegando desde estos llanos y marcó así la historia de la aviación en nuestro país. A él se le atribuye la formación de la Fuerza Aérea Mexicana y también se sabe que en 1911 el entonces presidente Francisco I. Madero realizó un vuelo que despegó desde ahí, en un avión piloteado por el británico Geo M. Dyott.
Con la llegada de la Revolución Mexicana el gobierno expropió los terrenos de los Llanos de Balbuena y como ahí ya existía un campo aéreo, Venustiano Carranza decidió instalar el primer aeropuerto del país conocido como el Aeródromo de Balbuena, que llegó a funcionar hasta 1948.
El lugar lleva su nombre en honor al poeta español Bernardo de Balbuena, que en 1604 le dedicó uno de sus poemas a la Ciudad de México.
Un fraccionamiento de estilo modernista
Para 1952, cuando el aeropuerto de Balbuena se mudó a otras instalaciones, se decidió urbanizar los terrenos del lugar ante la alta demanda de vivienda de la ciudad. Así se diseñó un proyecto modernista bajo los ideales nacionalistas, buscando una mejor calidad de vida y hogares dignos para la clase trabajadora.
Entonces el proyecto de urbanización quedó en manos de los arquitectos Mario Pani —que también se encargó de construcciones icónicas como la Torre Insignia, el Conservatorio Nacional de Música o el Conjunto Urbano Nonoalco Tlatelolco, entre otras— y Agustín Landa Verdugo, encargado de la construcción del Hospital 20 de Noviembre y de la red de clínicas del ISSSTE.
Esta nueva colonia de la capital mexicana sería autosuficiente, con edificios multifamiliares, viviendas dúplex y unifamiliares, además de hermosos jardines, amplios camellones, escuelas, diferentes comercios y todos los servicios necesarios.
La Jardín Balbuena se distingue por sus camellones y áreas verdes. Sus calles fueron trazadas como vialidades cerradas con retornos para darle preferencia a los peatones. En esta colonia están las instalaciones de la alcaldía Venustiano Carranza y además está ubicada cerca del Centro Histórico de la CDMX.
En un principio fue habitada por trabajadores y algunos comerciantes del Mercado de La Merced, e incluso por algunos altos funcionarios que adquirieron viviendas de lujo.
La Ciudad Deportiva Magdalena Mixhuca se inauguró en 1958 y más tarde, en 1959 se inició la construcción del Autódromo de los Hermanos Rodríguez. El Velódromo Olímpico Agustín Melgar se inauguró en 1968 para ser sede de los eventos de ciclismo de los Juegos Olímpicos de México.
Lo que hoy es el Estadio GNP se inauguró como foro para conciertos en 1993 y como estadio de béisbol fue la casa de los Diablos Rojos de México durante 14 temporadas. Asimismo, aunque no está ubicado en la Jardín Balbuena, muy cerca de ahí tenemos el Palacio de los Deportes, inaugurado también para las Olimpiadas de 1968 en la colonia Granjas México.
Curiosamente, entre los personajes famosos que nacieron, crecieron o llegaron a vivir en la colonia Jardín Balbuena tenemos a varios deportistas icónicos como los futbolistas Enrique Borja o el pentapichichi Hugo Sánchez, el boxeador Raúl “Ratón” Macías y luchadores como Cien Caras, Máscara Año 2000 y Universo 2000. También el ex presidente Ernesto Zedillo vivió en su juventud en este barrio de la ciudad.
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