Red Bull perdió en un año, no solo el dominio que tanto trabajo le había costado conseguir en la Fórmula 1, también a dos de sus piezas importantes, Jonathan Wheatley y Adrian Newey. Y según las palabras de Helmut Marko, la crisis del equipo inicio con la muerte de Dietrich Mateschitz.

Aunque también aseguró que el escándalo de Christian Horner fue un factor importante para que Newey decidiera firmar con Aston Martin y emprender un nuevo reto junto a Lawrence Stroll y Fernando Alonso.

La muerte de Dietrich Mateschitz y la salida de Adrian Newey

Dietrich Mateschitz falleció en octubre del 2023. Él era el encargado de tomar las decisiones del equipo, no tenía miedo de tomar riesgos siempre y cuando fuera por el bien del equipo, de acuerdo con la experiencia de Helmut Marko, quien además era su amigo cercano.

En aquel entonces, se habló de que el propio Helmut podría salir de Red Bull tras la ausencia de Dietrich. Aunque poco tiempo después fueron los ingenieros los que comenzaron a dejar al equipo. Jonathan Wheatley estuvo por 19 años, mientras que, Adrian Newey por 17 años.

De acuerdo con Helmut, de no ser por la reestructuración que sufrió la empresa, ambos personajes seguirían dentro del equipo.

“Con la muerte de Dietrich Mateschitz se produjo un cierto cambio. De hecho, él era el único líder. Tomaba decisiones rápidas. Era un empresario carismático que también tenía mucha visión de futuro y estaba dispuesto a asumir riesgos con la escudería.

La empresa y todo lo demás tiene que establecerse de manera diferente, porque no se puede encontrar otro individuo como él y no puede ser sustituido por una persona. Eso también puede formar parte del cambio… Creo que ésa fue la razón principal de la decisión de Newey de buscar un nuevo reto“ dijo para ORF.

El ‘Caso Horner’ también influyó

La temporada 2024 de Fórmula 1 inició con las acusaciones contra Christian Horner por comportamiento indebido con una de las empleadas de Red Bull, incluso se habló de su posible salida del equipo.

La imagen del equipo se vio afectada, la armonía del equipo se rompió y creo dos bandos: Marko y los Verstappen contra Horner y sus aliados. Una situación que puso en riesgo hasta la permanencia de Max Verstappen.

Sin embargo, quien dejó Red Bull con todo y sus problemas de rendimiento fue Adrian Newey y Jonathan Wheatley.

“Digámoslo así: el asunto Horner no ayudó. Pero internamente nos sentamos y dijimos que tenemos que unir fuerzas, trabajar juntos en todas las áreas para traer a casa este campeonato del mundo y también tener un coche ganador para el futuro”.

El riesgo de perder a Max Verstappen

Si hay algo que le gusta a Max Verstappen es ganar. Lo hemos visto desde que llegó a la F1 y no tener las herramientas suficientes para hacerlo es algo que lo frustra. Helmut Marko lo tiene muy claro, tanto que si no logran darle un auto competitivo es prácticamente un hecho que buscará salir del equipo.

Red Bull no se puede dar el lujo de perder a su tricampeón, menos ahora que tampoco tiene un auto competitivo como lo era el RB19. Max no sufrirá por encontrar lugar en un equipo top, Mercedes ya le estuvo coqueteando un buen tiempo e incluso el propio Verstappen habló de correr para Ferrari.

“Una cosa está clara: si no proporcionamos a Max Verstappen un coche con el que pueda ganar a largo plazo, todos los contratos de los mejores pilotos tienen cláusulas de salida relacionadas con el rendimiento, y Max definitivamente verá su futuro donde se le ofrezca el mejor paquete. Mientras siga disfrutando. Hay otro factor que ha entrado en juego…”.

Por ahora, el equipo debe concentrarse en dos cosas, impedir que más de sus empleados se vayan a otros equipos y trabajar para tener un auto lo suficientemente competitivo para Max Verstappen.

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