Para muchos, fue uno de los creativos que marcó la historia del rock alternativo. También fue uno de los pocos artistas que, como productor, reafirmó los ideales de lo que significa ir en contra de la industria. Eso y más era Steve Albini, quien creció como un amante del punk rock, se forjó en el periodismo y se convirtió en leyenda de la producción musical.
Aunque bueno, en realidad a él no le agradaba ni tantito que lo llamaran ‘productor’… Mejor dicho, consideraba que su trabajo era el de un ingeniero de grabación más que otra cosa. Y en ese sentido, buscó no llevarse más crédito del que creía que le correspondía.
Steve Albino en su reconocido Electrical Audio Studio. Foto: Getty.
Los artistas –algunos más reconocidos y otros no tanto– lo buscaban porque sabían que era un auténtico clavado de priorizar la música y la esencia de las bandas lejos de la imposición de las disqueras. Pero Steve Albini no abrazaba tanto ese ideal que algunos tenían de él mismo como leyenda; él se consideraba más un trabajador al que contrataban para la grabación de un material discográfico.
Aunado a eso, se conocía su tendencia por no cobrar regalías y solo poner una tarifa fija para quien quisiera grabar en su estudio. Si podías pagar, estabas dentro. Además Albini, entre sus diversas maneras de ir contra la corriente, se negaba a cobrar porcentajes por las ventas de los discos, considerando que no era ético.
Era un crítico total de la industria musical, de esos outsiders que han ido desapareciendo en realidad. No por nada Dave Grohl, de la manera más curiosa y amistosa, lo señaló en algún documental como un artista brillante gracias a su cualidad de ‘imbécil cínico’. Y todo eso lo podemos traducir en otros términos como una seña de autenticidad.
Steve Albini durante un show con su banda Shellac. Foto: Getty.
Justo como lo queremos recordar: como una de las mentes que dio sentido a nuestras vidas con un sinfín de discos de bandas como Nirvana, The Breeders, Pixies o PJ Harvey, siempre a través de la autenticidad. Aquí repasamos algunos de los discos más icónicos producidos –o mejor dicho, grabados– por Steve Albini.
7 discos producidos por Steve Albini (primero los más populares)
Surfer Rosa – Pixies
Es un caso bastante particular, porque es bien sabido que a Steve Albini nunca le gustó del todo lo que hacían los Pixies. “Realmente nunca me gustó su música de la forma en que me gustaba la música de mis bandas favoritas… Realmente nunca llegué a ese nivel de interés con los Pixies“, dijo en declaraciones para el libro Fool the World.
Sin embargo, aunque no conectaba con su música propiamente, Steve respetaba a la banda en el aspecto de que eran cuatro personas con poca teoría musica y estilismo, pero que tenían muchas ganas de crear.
“Las personas que aprendieron a tocar por sí mismas tenían una ventaja porque no estarían imitando… Estaban haciendo música a lo largo de líneas no convencionales en parte por ignorancia, pero me refiero a ‘ignorancia’ en un sentido halagador“. Aquí les contamos la historia del Surfer Rosa de Pixies.
Pod – The Breeders
Y ya que hablamos de los Pixies… Se sabe que Kim Deal no salió de la mejor manera de Pixies, sobre todo por las constantes fricciones y el protagonismo exacerbado de Black Francis que no permitía que los demás integrantes aportaran más creativamente hablando.
Pero Deal no se quedó con los brazos cruzados. Salió de la banda y de inmediato se juntó con Tanya Donelly de Throwing Muses (banda que salió de gira con Pixies en el pasado) para formar The Breeders. Kim, por otro lado, ya conocía la forma de trabajo y las condiciones que Steve Albini pedía para grabar…
Como dijimos antes, Albini no era fan de la música de Pixies, pero siempre tuvo esa sensación de que Kim era una genio poco valorada. Así que verla en su propia banda ciertamente debió ser un incentivo importante.
También Steve Albini aportó la idea de reclutar a Britt Walford de Slint como baterista, solo que este último pidió usar el pseudónimo de ‘Shannon Doughton’ para no acaparar su trabajo principal con los ya mencionados Slint.
In Utero – Nirvana
Surfer Rosa de Pixies y Pod de The Breeders comparten algo más que solo a Kim Deal como integrante de cada banda. Kurt Cobain tenía a esas dos producciones entre sus álbumes favoritos de toda la vida… Así que no es extraño suponer por qué el líder de Nirvana quiso trabajar con Steve Albini, quien eventualmente produjo In Utero para la legendaria banda de grunge.
Tampoco es que Kurt y Steve fueran desconocidos entre ellos. Como el propio Albini menciona en una entrevista con Louder, ambos crecieron en el mismo círculo underground y tenían amigos en común antes de que Nirvana se convirtiera en el fenómeno que fue. Y luego del éxito comercial de Nevermind, Cobain quería volver a sentir esa libertad de hacer buen ruido.
Por ello, para In Utero, Kurt contactó a Albini y empezaron a intercambiar puntos de vista sobre lo que trabajarían. Por un lado, Steve, un conocido crítico de la industria musical más corporativa, mandó una carta explicándole a la Nirvana cuáles eran sus convicciones, ideales y formas de trabajar.
“Sólo estoy interesado en trabajar en discos que reflejen legítimamente la percepción que la banda tiene de su música y su existencia… Si se comprometen con eso como principio de la metodología de grabación, entonces me romperé el trasero por ustedes“, decía la carta de Steve Albini según Louder.
Kurt Cobain, hastiado por la atención mediática y con ganas de crear algo rompiera con la expectativa de la disquera, encontró en el productor de Chicago a un ‘alma gemela’ que impulsaría esa libertad creativa y que además recrearía este sonido y proceso de grabación que precisamente a Cobain le encantaba de los ya mencionados Surfer Rosa y Pod.
El resultado de la alianza Nirvana-Steve Albini fue In Utero, un disco ruidoso, distorsionado, sombrío y sensacional que enalteció el lado más crudo del grunge…. Y que para los miembros de Nirvana, también significó el disco más puro, real y natural que hubieran grabado. Sí, todo eso, de alguna manera gracias a Steve Albini.
Rid Of Me – PJ Harvey
No podemos hablar de discos producidos por Steve Albini sin dejar de mencionar a uno que es una de sus notas más altas… Se sabe que al productor le había gustado Dry, el primer disco de PJ Harvey, porque el sonido era lo más cercano a lo que uno podía escuchar en los conciertos de la banda. Entonces, ¿qué buscaba la artista británica contrarando a Albini?
“Sólo querían una presentación un poco más dramática. Porque gran parte de la música esta vez tuvo grandes cambios dinámicos donde pasaría de tranquila y de mal humor a grandilocuente, las secciones dinámicas más grandes. Querían sacar provecho de eso”, dijo Steve en una entrevista con Spin Magazine.
El disco recibió la aclamación de la crítica, pero aunque no lo crean, Albini sí recibió algunas críticas por la producción cruda y las capas de sonido que, según algunos, enterraban la voz de Harvey. Sin embargo, esos detallitos solo alimentaron el legado para el álbum, la artista y el productor, a quien ciertamente poco le importaron esos señalamientos.
24 Hour Revenge Therapy – Jawbreaker
Entre 1993 y 1994, Steve Albini se encontraba –según sus palabras– grabando a más de 100 bandas. Y entre todas esas bandas, había una que estaba haciendo ruido en la escena del punk rock… Sí, nos referimos a Jawbreaker.
La energía punk de la banda llamó la atención de Steve y fue esa misma cualidad punky la que permitió que el disco se grabara de un periodo muy corto de tiempo. Eventualmente, algo que no sabía el grupo que su productor también había producido a Nirvana…
Y, oh sorpresa, la banda de punk salió eventualmente de gira por un rato con los más grandes nombres del grunge. Eso sí, el vínculo entre ambas bandas no se dio por Albini, sino por Cali DeWitt, un conocido diseñados y artista que en aquellos tiempos trabajaba cuidando a Frances Bean, la hija de Kurt.
Como sea, aquí hay un detalle imperdible: que Steve haya producido en un mismo periodo de tiempo a la banda más importante del mundo y al combo punk más interesante, habla de su legado como uno de los arquitectos definitivos de la escena del rock de esos años.
Goat – The Jesus Lizard
Como lo leyeron al inicio en el apartado de Pixies, The Jesus Lizard no es cualquier banda en lo que respecta al gusto musical de Steve Albini. Por el contrario, son una de las bandas declaradas favoritas por él mismo.
¿Se imaginan entonces el entusiasmo que había en cada producción que hicieron juntos? Para este listado, fue complicado porque los primero cuatro lanzamientos fueron grabados junto a Albini…
Pero en el balance general, se considera a Goat el disco que con el que The Jesus Lizard se afianzó como una de las bandas más importantes del llamado noise rock de la escena underground de los 90.
Atomizer – Big Black
Entre un montón de trabajos como productor e ingeniero de sonido, a veces se nos olvida que Steve Albini también fue un músico que rascó la historia con diferentes proyectos en los que tocaba la guitarra y cantaba.
Sin embargo, Big Black es la banda que le mostró el camino no solo como artista en una banda, sino como productor. Y el disco Atomizer de 1986 le mostraba a la escena underground esa calidad de espíritu punk que podía ser llevada hacia diferentes estilos.
Las texturas post-punk son notables, pero hay elementos diferentes que se encaminan hacia el noise rock (por algo le encantaba The Jesus Lizard) o incluso hacia los arreglos electrónicos casi de corte industrial… En fin, Albini y compañía detonaban una experimentación que demostraba la cualidad del artista más allá de los estándares conocidos: la autenticidad.
Todos estos discos producidos por Steve Albini demuestran el legado que nos deja. Y aunque él falleció el 8 de mayo, es justo decir que su huella en el rock alternativo será siempre significativa. Hasta siempre a uno de los artistas y amantes de la música más grandes que jamás existió.
The post Joyas absolutas: 7 discos producidos por Steve Albini para entender su legado appeared first on Sopitas.com.
Este domingo 9 de marzo, agentes del Servicio Secreto dispararon a un hombre armado que se encontraba a las afueras de la Casa Blanca.
Un domingo bastante movido para el Servicio Secreto de los Estados Unidos. Y es que este 9 de marzo, la agencia federal tuvo que confrontar a balazos a un hombre que se encontraba armado a las afueras de la Casa Blanca.
Un hombre armado resultó herido afuera de la Casa Blanca. Foto: Getty Images
Un hombre armado resultó herido afuera de la Casa Blanca, en Estados Unidos
A través de un comunicado (citado por TMZ), el Servicio Secreto detalló que el pasado sábado 8 de marzo recibieron un reporte por parte de la policía local por un hombre –el cual creen que tenía tendencias suicidas– que había viajado desde Indiana a Washington D.C. a última hora.
Los agentes de la agencia estadounidense se dieron cuenta que ese hombre estaba estacionado junto a un edificio directamente al lado de la Casa Blanca. Cuando se le acercaron, el hombre sacó un arma de fuego y “se produjo un enfrentamiento armado, durante el cual se dispararon tiros”.
Esto luego de un enfrentamiento con agentes del Servicio Secreto. Foto: Getty Images
Esto luego de un enfrentamiento con agentes del Servicio Secreto
En el comunicado, el Servicio Secreto mencionó que el hombre en cuestión resultó herido en el enfrentamiento y tuvo que ser trasladado a un hospital local, donde se desconoce su estado de salud.
Por su parte, ninguno de los agentes del Servicio Secreto resultó herido y la situación ya es investigada por las autoridades estadounidenses, quienes indagarán sobre las intenciones de este sujeto de andar armado afuera de la residencia presidencial.
El comunicado del Servicio Secreto sobre lo ocurrido.
Te puede interesar
Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com
Redactora de música, entretenimiento y noticias. Llevo siete años en medios de comunicación y he tenido la oportunidad de conocer, entrevistar y escuchar en vivo a mis artistas favoritas.
More by Stephania Carmona
La nueva muestra del MUAC nos enseña la forma en la que un artista conceptual percibe la CDMX.
El artista Dennis Oppenheim amaba recorrer las calles de la Ciudad de México, particularmente sus mercados. Visitó una multitud de lugares que no sólo lo impresionaron sino que lo inspiraron a crear poéticas plásticas y una exposición llamada Materialidad del Consumo, que en estas fechas se presenta en el MUAC.
Y es que más que una muestra, plagada de colores, texturas y esculturas de diferentes dimensiones, Materialidad del Consumo es algo así como un viaje íntimo a la verbena cotidiana de la capital mexicana; esa que tiene que ver con nuestros hábitos de consumo y con el comercio popular.
La nueva exposición del MUAC /Imagen Wikipedia.
Esta exhibición es también un homenaje necesario a uno de los artistas estadounidenses más interesantes del sigloXX. Oppenheim fue uno de los grandes referentes del arte conceptual, cuya obra siempre desafió las formas tradicionales de y nos permitió indagar en el verdadero significado de las cosas.
La expo se presentará hasta el 6 de abril en el famoso recinto del CCU, y es sin duda, una buena oportunidad para disfrutar estos días de calor con una bebida fría y mucho arte.
Reflexiones sobre Dennis Oppenheim
“La mayor parte de mi trabajo provine de un grupo de ideas, de las sólo uso un pequeño fragmento. En ese sentido, el Land Art me ha permitido explorar, conceptos fuertes capaces de mutar.”
Nacido el 6 de septiembre de 1938 en Washington, Oppenheim fue hijo de dos migrantes rusos que le heredaron una manera particular de percibir la existencia. Creció en un barrio de clase trabajadora de California, y desde niño supo que se quería dedicar al arte.
Uno de los referentes del Land Art. /Imagen Wikipedia
Estudió en la Escuela de Artes y Oficios de California, pero nunca se sintió cómodo. Por eso se mudó en 1966 a Nueva York, la ciudad donde logró desarrollarse como artista y encontrar su voz creativa. Ahí tuvo la oportunidad de conocer a grandes exponentes del arte contemporáneo y forjar una carrera prolífica y original.
En la década de los 70 fue uno de los precursores del arte conceptual y del land art, un movimiento de vanguardia que involucraba directamente las obras de arte con el paisaje y la atmósfera.
En ese sentido, sus obras son más bien una experiencia sensitiva que nos permite revisitar, a través de los objetos de la vida cotidiana, lo que sabemos del presente.
Una Instalación que desafía es estatus quo/Imagen Wikipedia
Entre sus piezas más destacadas, vale la pena mencionar Dispositivo para obrar maldonde podemos contemplar literalmente una iglesia de estilo Nueva Inglaterra construida al revés. Con la punta del campanario clavada al suelo, y las puerta de entrada flotando en las alturas, suspendida en el tiempo.
Sobre Materialidad del Consumo
En 1998 Dennis hizo una exposición para el Museo Carrillo Gill que consistió en la instalación de siete paisajes visuales inspirados en los símbolos sociales y culturales de la CDMX y en el famoso surrealismo mexicano.
Los materiales de cada pieza se sacaron de los mercados, tlapalerías y bodegas industriales. Estas esculturas modernas dialogan con la identidad nacional y su relación con la globalización. En ese sentido, las esculturas nos permiten reflexionar sobre las capas simbólicas con las que convivimos todos los días.
Se usaron materiales del mercado. /Imagen MUAC Facebook
En la exposición podremos no sólo contemplar las piezas, de colores, formas, texturas y materiales diversos, como el plástico, sino que podremos sumergirnos en la atmósfera folclórica de la capital desde la mirada de uno de los artistas contemporáneos más disruptivos.
Para entender los pormenores de su paso por la CDMX, basta recorrer los nombres de las piezas: Cuatro famosos edificios históricos españoles, Quisco, Ángeles y Sombrero con halo.
Esta muestra se hizo en 1998./Imagen MUAC Facebook
Finalmente, la muestra es que nos permite ver cómo nos ven. Y es que antes de su muerte en 2011, Dennis Oppenheim transformó para siempre nuestra relación con los huacales y hasta las pequeñas jotas inadvertidas que aparecen en los tianguis los domingos.
¿Cómo, cuándo y dónde?
Fecha: Estará hasta el 6 de abril
¿Dónde? Museo Universitario de Arte Contemporáneo.
Dirección: Avenida Insurgentes Sur 3000, Coyoacán.
Costo: $40
*El museo está abierto de Miércoles a domingo.
Te puede interesar
Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com
La paella se come desde el siglo XV. Este platillo es un viaje en sí mismo y en la CDMX hay lugares que saben cómo prepararla.
Si hay algo claro de la CDMX, es que aquí se puede comer muy bien. Además de ofrecer lo mejor de la gastronomía mexicana, en esta ciudad pueden encontrar sabores, restaurantes y platillos de muchos lugares, como por ejemplo, España un país con una inmensa tradición culinaria, en la que existen obras de arte como los pinchos, la tortilla y por supuesto la paella.
Más que un plato, hecho con arroz y azafrán, la paella es un viaje en sí mismo. Una travesía de especias, verduras y proteínas que nos permite probar la cultura de Valencia, una provincia al este de España, donde se mantienen vivas las recetas y las influencias árabes que llegaron a la Península Ibérica en otros siglos.
La paella es originaria de Valencia/Imagen Unsplash
Hoy en día, además de ser quizá la gran exponente de la cocina de española, la paella es también el pretexto para sentarnos juntos en una mesa grande y compartir algo más que la comida deliciosa.
La insospechada historia de la Paella
Para entender la evolución de este platillo, habría que empezar por la etimología del vocablo. Algunas versiones sugieren que paella proviene del latín “patella” que se traduce como sartén. Hay quienes aseguran que esta palabra se usaba en la antigüedad para designar cualquier comida que pasara por el fuego.
Otras teorías plantean que tanto la palabra como la receta nacieron gracias a un cocinero que quería conquistar a una mujer y que en realidad el topónimo nació como un atajo de “para ella”.
Hay diferentes teorías sobre el origen del nombre-/Imagen Unsplash
Lo que sí es una certeza es que la paella era se comía en las zonas rurales de Valencia desde el siglo XV. Los expertos sostienen que los campesinos lo preparaban porque era fácil de cocinar y sobre todo porque podían usar los ingredientes que tenían a la mano, y no desperdiciar nada.
La paella se cocinaba para la cena, a fuego lento. Su receta consistía en mezclar muchos vegetales, azafrán, arroz, aceite de oliva y distintos tipos de proteínas como res, pollo, conejo y cerdo. El secreto era acompañar el proceso con hojas de naranjo, para dar un toque único.
Lugares para comer Paella
Dicho lo anterior, y porque hay que comer rico todos los fines de semana, aquí les dejamos una selección de restaurantes de la CDMX, donde se prepara la mejor paella. Algunos de estos establecimientos han logrado domar la receta tradicional y otros la han fusionado con ingredientes mexicanos; cada quien decide cuál es la que más le gusta.
Fundado en 1863, en uno de los palacios más bonitos del Centro Histórico, este restaurante es un ícono en lo que a comida sofisticada, de corte muy tradicional, se refiere.
Un establecimiento típico del Centro./Imagen Casino Español Instagram
En este sitio la paella es más bien una obra de arte protagonizada por un arroz cuyas especias huelen a kilómetros y proteínas frescas que son perfectas para maridar con un buen vino ibérico.
Si lo que se busca es regresar a las raíces clásicas de la paella, nada como un restaurante enfocado totalmente en al comida española.
Este restaurante tiene tres sucursales. /Imagen Bulla Instagram
Aquí encontraremos una colección de platillos típicos como croquetas de jamón serrano, gazpacho y una paella gigante llena de camarones, mejillones y sabores que nos hacen sentir en el campo de Valencia.
Además de tener una estupenda colección de platillos españoles, como un buen plato de lentejas, este restaurante nos ofrece recetas del mediterráneo que no hay en otro lugar de la ciudad.
Un restaurante en donde todos los platillos saben a España. /Imagen Castizo Instagram
Su paella es un mosaico de influencias, desde la presentación hasta el sabor, todo está pensado para comer delicioso.
Eh aquí el clásico bar de tapas español en el corazón de Polanco. Todo lo que hay en el menú es un pedazo de historia, un homenaje a las recetas casetas de antaño.
La especialidad de la casa es la paella con mariscos. /Imagen Jaleo Instagram
En Jaleo hay posibilidad de probar la clásica paella de mariscos. Para probarla ee puede ir al establecimiento o incluso pedirla a domicilio.
Un clásico capitalino, que desde hace 35 años, nos ofrece una paella divina protagonizada por ingredientes como chorizo, mejillones, camarones y hasta almejas que se deshacen en la boca.
Aquí hay paella todos los findes de semana-/Imagen Barranca Valenciana Instagram
En este restaurante de Coyoacán, la paella se prepara todos los fines de semana, y se acompaña con tortas de jamón serrano o chorizo.
Se trata de una iniciativa que mezcla magistralmente lo mejor de la gastronomía española con nuevos elementos. En la barra encontraremos tapas, mariscos, arroces (algunos negros) y paella con un toque autoral. Su paella es única, una sinfonía exquisita que mezcla especias y muchas proteínas.
Una paella con sabor autoral. /Imagen Barra de Fran Instagram
Te puede interesar
Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com